HABLAMOS CON VIRGINIA YÓDISE, INTEGRANTE DEL TRIBUNAL DE ÉTICA DEL COLEGIO DE NUTRICIONISTAS DE SANTA FE.
Con la votación en el Senado del proyecto de ley, la Argentina dio un paso en la regulación del etiquetado frontal de alimentos envasados. El objetivo es modificar hábitos de consumo y hacer más sencillo el acceso a la información sobre la composición nutricional de los alimentos.
El rotulado frontal establece un esquema de sellos de advertencia frontales en los envases, que alertan al consumidor cuando el producto presenta exceso de cinco componentes, entre los cuales se incluyen el azúcar, el sodio, las grasas (saturadas y totales) y el valor energético (calorías). Para ello, se busca establecer la obligatoriedad de incorporar un octógono negro, que le avise al consumidor que, respecto de esos contenidos, se superan determinados umbrales.
Virginia nos decía que lo que se pide con este nuevo etiquetado frontal es que rápidamente el consumidor pueda ver qué tipo de contenidos tienen los productos que compran, ya que el etiquetado de atrás tiene muchas terminologías y una letra muy pequeña que es muy difícil de entender o ver para el común de la sociedad.
Otra de las condiciones que establece esta nueva ley de rotulados es que no se podrán utilizar en los paquetes caricaturas, superhéroes o deportistas en productos para niños, para que los pequeños no se sientan influenciados a comprar determinado alimento sólo por un personaje en particular. Tampoco se podrá colocar mensajes saludables en un producto que tengan alta cantidad de nutrientes críticos.
Virginia nos decía que el 60% de la población argentina padece algún tipo de enfermedad relacionada al estilo de vida, como el sobrepeso u obesidad, diabetes y otras que se ven afectadas por la mala alimentación y la poca actividad física. La mala alimentación no esta solamente relacionada con comidas rápidas y altas en grasas, sino que muchos alimentos que podemos considerar que son saludables en realidad presentan alto porcentaje de grasas saturadas, sal, azucares o edulcorantes ocultos y muchos otros aditivos que ayudan a tener buen sabor al producto, pero que no son saludables para el cuerpo humano. Es por ello la importancia de este nuevo rotulado en los productos.
Otros países ya implementaron este tipo de rotulado de octógonos negros en el frente del paquete, y se logró que las empresas comenzaran a bajar la cantidad de azúcares, sal y aditivos para no tener que usarlos, produciendo así alimentos más saludables.
“Nadie esta prohibiendo el consumo de un producto… Es decir `esto es lo que me ofrece el mercado, yo elijo entonces mejor cuando tomarlo, cuando no, sé que me puede hacer mal´…” expresaba Virginia.